lunes, 31 de diciembre de 2007

"American Gangster" - Washington Vs. Crowe. El último duelo





Uno de los aspectos más favorables del cine que hemos visto este 2007 es el que se centra en los duelos interpretativos. En este año que ya acaba hemos sido testigos de la lucha interpretativa entre algunos de los mejores actores y actrices de la actualidad. Enero comenzó con el enfrentamiento en pantalla de Hugh Jackman y Christian Bale en la notable "El truco final", que ganó el primero de ellos. En febrero,"Diamante de sangre" nos ofrecía el duelo entre Leonardo Di Caprio y Djimon Hounsou, que quedó en tablas y así lo vió la Academia, nominando a ambos al Oscar. Marzo nos trajó dos de los mejores trabajos interpretativos del año, los protagonizados por Judi Dench y Cate Blanchett en la excelente "Diario de un escándalo". No veriamos otro dúo de actores sobresalientes hasta octubre, fecha en la que se estrenó "Promesas del Este" y que nos regaló dos sublimes actuaciones, la de Viggo Mortensen y Vicent Cassel. Este mismo mes nos trajo el que, para mí, es el mejor duelo interpretativo del año (honor ahora compartido con "American Gangster"), el que se produce entre Brad Pitt y Casey Affleck en la sublime "El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford". Por si esto fuera poco, a todas estas excelentes actuaciones hay que sumarles dos más, las que ofrecen Russel Crowe y, sobre todo, Denzel Washington, en "American Gangster", el último trabajo de ese director tan irregular que es Ridley Scott.


"American Ganster" nos cuenta, por una parte,la vida y obra de un traficante de drogas, Frank Lucas (Denzel Washington), y su ascenso y posterior caida en el poder, mientras que en una vertiente paralela en la narración se nos presenta la vida de Richie Roberts (Russel Crowe),un policía algo torpe y noble, que se encuentra en un momento complicado de su vida, hasta que se encuentra con el caso de intentar capturar a Lucas, algo que le ofrece la oportunidad de demostrar su valía dentro del cuerpo de policía. Todo esto en el contexto de la década de los 70, un ambiente lleno de corrupción, drogas, mentiras y descontrol.


Estas son las cartas con las que Scott juega durante más de 140 minutos, un extenso metraje en el cual se suceden, de manera perfecta, la presentación de personajes, acontecimientos de alto calado emocional, y una estupenda persecución gato/ratón entre Crowe y Washington que, a pesar de tardar en producirse, nos devuelve a través de apasionante cine el tiempo empleado. Y es que "American Gangster" encierra tanto buen cine dentro, tan alto número de escenas para el recuerdo (ese enfrentamiento entre Frank Lucas y uno de sus enemigos en medio de una transitada calle bajo la atenta mirada de todos sus hermanos, ese violento y excelente prólogo,todos y cada uno de los momentos en los que Lucas muestra su dureza y, sobre todo, el encuentro entre Crowe y Washington a la salida de la Iglesia, una de las escenas más redondas del año y auténtica cima del film), y tantos logros que lo que este humilde aprendiz de crítico puede hacer es recomendar cuanto antes su visionado.


El espectacular guión de Steven Zaillian facilita bastante las cosas a la dirección de Ridley Scott, pero no hay que quitar ni un solo mérito a un hombre capaz de hacer lo mejor ("Blade Runner", "Alien"), pero también lo peor ("El reino de los cielos","Hannibal"). En esta ocasión Scott dirige de manera perfecta, concisa, con planos sublimes (la propagación de la droga en los distintos barrios) y con una maestría que demuestra que, cuando quiere, puede estar entre los mejores.
Como complementos a la dirección de Scott se encuentra una increible ambientación, una acertada banda sonora de Marc Streitenfeld acompañada de conocidos temas musicales de la época, y una brillante fotografía de Harris Savides que no hacen sino redondear un trabajo de producción para recordar.


Y ahí están Denzel Washington y Russel Crowe. El primero reconfirmando que es uno de los mejores actores de los últimos tiempos, y el segundo recordándonos que, cuando quiere, es un grandísimo intérprete.
Y es que Crowe se olvida de la sobreactuación ("Una mente maravillosa")y de la excesiva seriedad, convertida en sosería ("Master and Commander")y nos ofrece su mejor cara, la sobria, centrada, carismática, esa con la que el actor nos ha regalado sus mejores interpretaciones ("L.A. Confidential", "El Dilema"). Y que decir de Denzel Washington, ese actor capaz de hacer creible y totalmente propio todos y cada uno de los personajes que interpreta. Enorme, poderosa, excelente o memorable, son algunos de los adjetivos que se pueden otorgar a la interpretación de Wsshington, una actuación y un personaje que entra directamente en la lista de los trabajos más inolvidables de este grandioso actor ("Huracan Carter", "Philadelphia", "Training Day" o "Tiempos de gloria").


En definitiva, "American Gangster" es la suma de varios factores:

1º - Un guión espléndido.

2º - Una ambientación perfecta.

3º - Una dirección sobresaliente.

4º - Russel Crowe.

5º - Denzel Washington.

Como resultado de esta suma tenemos 157 minutos de cine de alta calidad, de cine que apasiona, que entretiene y que, sobre todo, justifica el precio de una entrada, algo cada vez más complicado. Ha entrado en meta en el último momento, pero "American Gangster" no tiene, ni mucho menos, problema alguno para convertirse en una de las mejores películas del 2007.


Nota: 10


Taxman

miércoles, 26 de diciembre de 2007

Mejores discos internacionales del 2007

Para los enamorados de la música, el 2007, año que llega a su fin,nos ha dado grandes momentos, tremendas canciones que nos acompañarán siempre, nos ha regalado trabajos discográficos magistrales, regresos de genios, confirmaciones de estrellas,etc. En definitiva, horas y horas de sentimientos convertidos en canciones. Estos son, bajo mi punto de vista, los diez mejores discos del 2007.






1º - "Release the stars" - Rufus Wainwright: tras "Want one" y "Want two",dos de las obras maestras más grandes que ha conocido el siglo XXI, Rufus se enfrentaba a un nuevo proyecto con el riesgo de resultar repetitivo, de no encontrar nuevas maneras de contar sus historias, pero el resultado es un disco redondo, emocionante y absolutamente magistral en cuanto a ejecución vocal e instrumental se trata (la voz de Wainwright es lo mejor que tiene la música desde hace mucho tiempo). Canciones como la excelente "Going to a town", la enorme "Do i dissapoint you", "Between my legs", "Nobodys off the hook", la increible "Slideshow" o, la mejor canción del 2007, "Release the stars", son ejemplo del porque Rufus Wainwright se ha coronado como el artista más completo de cuantos podemos encontrar actualmente.



"Going to a town"





2º - "Cassadaga" - Bright Eyes: la auténtica sorpresa de este año. Bright Eyes, o lo que es lo mismo, Conor Oberst, nos regala unos de los discos más hermosos de los últimos tiempos. Con unas letras que podrían estar firmadas por el mismisimo Dylan, y unas melodías dignas del mejor McCartney, "Cassadaga" se confirma como un futuro clásico, sino lo es ya, dentro de la música contemporánea. Pocas, muy pocas, canciones están a la altura de la grandeza de "Four winds" o "Classic cars", de la melancolía de "Make a plan to love me" o "Lime tree" o de la genialidad absoluta de "If the brakemans turns my way" o "No one would riot less". Acercaos a "Cassadaga", merece la pena.




"No one would riot less"





3º - "Magic" - Bruce Springsteen: y el Jefe volvió. Y con él, lo mejor de la E Street Band, la épica, las letras desgarradas, la voz rota, y esta vez, el mejor pop. Y es que el disco que ha ofrecido Bruce Springsteen este año es un disco de POP, así con mayúsculas, inspirado, emocionado, sincero y, absolutamente, redondo. Tras el magistral "The Rising", el Boss volvía a reunir a la E Street para grabar un trabajo sólido y perfectamente estructurado que devolvía, de manera magistral, la música del Boss al pop. En canciones como "You,ll be coming down", "Livin' in the future", "I,ll work for your love" y, sobre todo, "Girls in the summer clothes", Springsteen juega a ser Phil Spector y le sale la jugada perfecta, combinando estos momentos con otros de puro y duro rock épico marca de la casa como en las enormes "Gipsy Biker", "Devil,s arcade" o, el mejor tema de todo el disco, "Long walk home". En definitiva, una nueva joya para la carrera del Jefe y un regalo para nuestros oidos.



"Long walk home"






4º - "9" - Damien Rice: su primer disco, "O", nos hizo llorar a más de uno. La inclusión de su obra maestra "The blower,s daughter" en la banda sonora de "Closer" le dió una repercusión que se merecía. "O" era un debut asombroso, uno de los mejores discos que un cantautor había firmado en años, un sencillo y asombroso ejercicio de melancolía folk/pop. Así que el listón estaba más que alto, pero he aquí que el bueno de Damien, nos regala en su segunda entrega más de lo mismo, que no es, ni mucho menos, poco. Y es que "9 crimes" nos hace llorar, "The animals were gone" nos pone la piel de gallina, "Accidental babies" nos hipnotiza y "Elephant" es su nueva "The blower,s daughter", o lo que es lo mismo, una de las canciones más bonitas de lo que llevamos de siglo. Si vuelve a repetir la jugada una tercera vez consecutiva quizás nos cansemos, pero "9",la secuela de "O" suena a pura y dura melancolía, a preciosa música.



"Elephant"






5º - "Memory Almost full" - Paul McCartney: vale, no está en su mejor momento mediático. De acuerdo, este disco no alcanza, ni de lejos, a su predecesor "Chaos and creation in the backyard", pero pocos discos lo hacen. Pero es McCartney, y la mayoría de artistas actuales tienen en él un espejo donde mirarse, una continua fuente de inspiración. Mientras tanto, el bueno de Paul hace, por fin, lo que le da la gana. "Dance tonight", "See your sunshine","Vintage clothes" o "Feet in the clouds" son ejemplos del más puro pop, escrito e interpretado por el Maestro del género, y "House of wax", "The end of the end" y "Only mama knows" son tres obras maestras. Está bien, esto no es "Band on the run", "Ram" o "Tug of war", pero ni falta que hace; es McCartney haciendo música en el siglo XXI. ¿En serio os parece poco?



"The end of the end"





6º - "Neon Bible" - Arcade Fire: debo admitir que a mi su alabado debut, "Funeral", no me pareció tanto, tenía buenas canciones, grandes canciones y horribles canciones. Por eso me encontre reticente ante este nuevo trabajo de uno de los grupos más laureados de lo que llevamos de siglo. Pero esta vez no tuve más que rendirme y admitir que "Neon Bible" es una auténtica obra maestra. Sin fisuras, con un sonido fascinante y una interpretación instrumental y vocal enorme, Arcade Fire regala 11 laberintos sonoros menos complejos de lo que parecen, pero igualmente sublimes. Y no solo eso, sino que los canadienses ofrecen además dos de las mejores canciones del año, "Black Wave/Bad Vibrations", con uno de los finales más emocionantes que se recuerdan, y "My body is a cage", uno de los temas más estremecedores que servidor ha escuchado en su vida. Si a todo esto añadimos que "Neon Bible" contiene un CLÁSICO instantáneo como es "No cars go", la mejor canción del grupo de largo, pues tenemos en el segundo trabajo de Arcade Fire al grupo de genios que se nos vendió en 2004. Ahora sí, que suenen las alabanzas.



"No cars go"





7º - "Ga, ga, ga, ga, ga" - Spoon: esto, señoras y señores, es un disco de POP. Del pop que todos conocemos, ese que mezcla a Beatles con Spector, a los Byrds con Kinks, a Elton John con la E.L.O, al pop hermosos, contagioso, enorme, clásico e inolvidable. Todo es ejemplar en este disco, otra de las grandes sorpresas del año, que confirma el excelente estado de salud del género. Spoon, o lo que es lo mismo, Britt Daniel, ofrecen una colección de canciones perfectas, llenas de logros melódicos e interpretados con una simplicidad tras la que se esconde un genio. Si alguien no es capaz de engancharse con temazos como "You got your cherry bomb", "Rythm and soul", "Don,t you evah", "Black like me" o, sobre todo, "The underdog", que levante la mano.



"The underdog"





8º - "Life in cartoon motion" - Mika: que su nivel de petardeo es exagerado,que su estética puede resultar muy hortera y que su originalidad es 0 es algo que se admite y se respeta. Pero que "Grace kelly" es una de las mejores canciones pop del año y que ya se ha convertido en un clásico, también. Que hemos cantado y silbado "Lollipop", está más claro que el agua. Que hemos bailado e intentado imitar, con nefastos resultados, el estribillo de "Relax", es más que cierto. Que nos hemos emocionado en secreto con "Happy ending/Over my shoulder" es algo que deberíamos admitir. Que "Love today" podría estar firmada por el mejor Mercury es algo que está ahí. Y es que esta mezcla de Elton John, Rufus y, sobre todo, Robbie Williams, ha creado un disco que tiene a Queen, E.L.O, Bee Gees y, mucho, mucho, Scissor Sisters, en el disco. Pero es que lo mejor de todo es que esta marea de influencias se entienden, se respetan y hasta encajan, y de que manera, en uno de los trabajos más pegajosos y contagiosos, en el mejor sentido de las palabras, del año.



"Happy ending"





9º - "Easy tiger" - Ryan Adams: uno de los artistas más trabajadores del panorama actual (suele sacar una media de tres trabajos anuales), y creador de algunos de los mejores discos que se recuerdan ("Gold", "Heartbraker" o "Love is hell"), ofrece este año, su "disco comercial". Acepta el riesgo de domesticarse, de no emborracharse (algo de lo que no estoy muy seguro) y de escribir las 13 canciones más "aptas para todo el público" de su carrera. El resultado: si no existiera "Gold" estariamos hablando de su mejor disco. Y es que joyas como esa "Goodnight Rose" con la que se abre el disco, la contagiosa "Hallowenhead" o la belleza que transmiten "Ripp off" o "Two", no admiten pero alguno. Y por si esto fuera poco, el bueno de Adams canta mejor que nunca. Una auténtica joya de folk/pop/rock.



"Two"





10º - "Love" - The Beatles: son los más grandes. Siento no mostrar más objetividad, pero es que con ellos me es imposible. Acostumbrados a recibir las típicas recopilaciones de las "mejores canciones del grupo", que por cierto, nunca están todas, eso sería imposible, se agradece, y de que manera, un disco como "Love", la visión de algunas canciones del cuarteto por parte de su productor George Martin, que se confirma de manera definitiva como el auténtico quinto beatle. Mezclar "Blackbird" con "Yesterday", "Strawberry fields forever" con "Piggies" o "Drive my car" con "The word" era aceptar un riesgo, hacerlo de la forma que se ha hecho y que suenen como suenan, es un auténtico éxito. La paradoja de todo esto es que entre todas las mezclas e innovaciones se destaca una desnuda versión de "While my guitar gently weeps", obra maestra de Harrison que justifica por si sola la compra del disco. Son 26 obras maestras, 26 melodías inolvidables, 26 logros musicales sin precedentes, y, por primera vez, suena como si fuera un nuevo disco de The Beatles, y eso, señoras y señores, es lo mejor que le puede pasar a la música.



"While my guitar gently weeps"




Taxman

sábado, 22 de diciembre de 2007

"Soy leyenda" - Príncipe de Bel Air. Rey de Nueva York




Debe ser difícil para un actor enfrentarse como absoluto protagonista a una película como "Soy leyenda". Las dudas y temores se mezclan con lo apasionantes y excitante de un proyecto que ofrece un total lucimiento, una presencia en pantalla de más de hora y media apareciendo en cada uno de los fotogramas que la estructuran. Pero sobre todo hay que ser un gran, gran actor. Y el señor Will Smith lo es. De hecho es mucho mejor interprete de lo que la mayoría piensa. En su filmografía ha demostrado tener una versatilidad notable, intercalando comedias (la estupenda saga de "Men in black") con cintas de acción (la simpática "Independence Day" o la notable "Dos po´licías rebeldes"), pero el género donde realmente ha mostrado toda su capacidad es en el drama. Tras una fracaso tan considerable como "La leyenda de Bagger Vance", Smith ofreció todo un recital interpretativo en "Ali" que le llevó a su primera nominación al Oscar, hecho que se repetiría el año pasado con la maravillosa "En busca de la felicidad" en la que es, para servidor, su mejor actuación hasta la fecha.

Pues bien, un año después el archiconocido "Principe de Bel-Air", vuelve al cine más comercial con "Soy leyenda" una película mitad drama, mitad terror, mitad acción, que consigue unir todos estos géneros en la que se convierte, por derecho propio, en una de las propuestas más interesantes que ha ofrecido el cine este año y, de lejos, la mejor opción de cuantas se encuentran en una cartelera que espera como agua de mayo los estrenos de las películas denominadas: "de Oscar".

Basada en una novela de ciencia ficción escrita por Richard Matheson, se nos cuenta la historia de Robert Neville (Will Smith), único superviviente de una devastadora expansión de un virus que convierte a todas las personas en una mezcla de zombies - vampiros, el cual debe sobrevivir en una ciudad, Nueva York, totalmente desolada, con la única compañía de los susodichos zombies.

Con una premisa así, el director Francis Lawrence y, sobre todo, los guionistas Akiva Goldsman y Mark Protosevich, consiguen mantener la tensión y el interés del respetable enfrentando a Neville a luchas constantes frente a zombies y, sobre todo, al paso del tiempo y a si mismo. El factor psicológico del film,las reflexiones y desesperación que consigue transmitir con solo gestos el personaje de Smith es lo mejor de una película más que notable.

La labor de dirección de Francis Lawrence se puede considerar sobresaliente si tenemos en cuenta que contaba con solo una película a sus espaldas, la desastrosa "Constantine", que no ofrecía muchas garantías. A pesar de eso, Lawrence, se muestra más que cómodo mostrando una Nueva York sorprendentemente desolada únicamente habitada por un Smith que protagoniza otro montón de escenas dirigidas de manera directa, ágil y con capacidad propia para agobiar y asustar a más de uno. Mención especial al primer encuentro entre Neville y los zombies en un edificio, escena que consigue crear más desasosiego y tensión que la mayoría de películas de terror que han llegado a las carteleras este año, incluida "REC".

Para redondear el trabajo de Lawrence, encontramos una espléndida fotografía de Andrew Lesnie, y una excelente banda sonora firmada por el gran James Newton Howard, acompañada de apariciones puntuales de algunas de las mejores canciones del maestro Bob Marley (imposible levantarse de la butaca durante los créditos finales al ritmo de "Redemption song").

Pero, a pesar de todo, "Soy leyenda" tiene como pilar fundamental la interpretación de Will Smith. Una interpretación sobresaliente, contenida, redonda, que alza a Smith como uno de los mejores interpretes actuales y una apuesta segura cuando de ir al cine se trate. Su escena de despedida con su familia o, sobre todo, el estremecedor momento en el sótano con su única compañía en la ciudad, su perra, tras el ataque de los zombies, son una demostración de la capacidad interpretativa de uno de los actores que más y mejor han evolucionado con el paso del tiempo.


Nos encontramos, en definitiva, con una propuesta menos arriesgada de lo que podría haber sido, pero más emocionante de lo que uno se espera. Un film al que solo le sobran ciertas referencias y connotaciones religiosas que no vienen a cuento y que no aportan nada a la historia, pero que encuentra en el otro lado de la balanza momentos tan tensos, emocionantes y, sobre todo, entretenidos que hace que la película alcance por derecho propio el término sobresaliente.


En unos días en el que la cartelera anda tan pobre y falta de buenas propuestas, hacer compañía a Will Smith en un apocalíptico año 2012 es, sin duda, la mejor opción. Y es que "Soy leyenda" no es solamente uno de los films más entretenidos que ha dado este 2007 que ya se acerca a su fin, sino que es también un notable drama, una estupenda película de terror y una excelente cinta de acción con un Will Smith, el anteriormente conocido "Príncipe de Bel - Air", convertido esta vez en "Rey de Nueva York". ¿Qué más se puede pedir?



Nota: 9

Taxman


(Frase de "Príncipe de Bel - Air. Rey de Nueva York" cedida por Ideas MMA. ¡Gracias por todo Piii!)


viernes, 7 de diciembre de 2007

Bruce Springsteen - Waitin on a sunny day










Diez razones que he encontrado para poner esta canción en mi blog:

1 - Porque alegra el día a cualquiera.

2 - Porque tiene una de las mejores melodías que ha creado el Boss.

3 - Por la E Street Band.

4 - Por el público del Palau Sant Jordi.

5 - Porque es uno de los temazos de esa resurrección artística que significo para Springsteen, "The Rising".

6 - Por cada momento entre Clarence Clemons (saxo) y Bruce.

7 - Por la carrerilla de Springsteen.

8 - Por el solo de saxofón.

9 - Porque lo voy a ver en directo.

10 - Porque es Bruce Springsteen.




lunes, 3 de diciembre de 2007

Sabina - Calle melancolía

Este vídeo grabado por servidor en el concierto que dió el maestro Joaquín Sabina en La Manga en el verano de 2005 es la primera muestra que ofrezco del que será protagonista indiscutible en próximos artículos. Maestro, poeta, arriba el bombín. Perdón por la regular calidad del vídeo, espero que los próximos sean mejores.

Práctica de la usabilidad

Esta entrada corresponde a una práctica de la asginatura Documentación informativa



Usabilidad. Una palabra que todo el mundo puede entender y que muchos han definido. Sin embargo, ¿cuántos pueden presumir de facilitar productos con esta carcterística?

Según Redish, diseñador web, los usuarios deben "encontrar, en caulquier página web, lo que necesitan, entender lo que encuentran y actuar apropiadamente… dentro del tiempo y esfuerzo que ellos consideran adecuado para esa tarea".Ahora bien, podemos concretar una serie de normas básicas de diseño para conseguir que, una página web adquiera la cualidad de usabilidad:
Los textos deben ser legibles.Es muy importante tener en cuenta el tipo y tamaño de letra, el contraste del texto, el fondo, etc. Además, es recomendable escribir textos cortos.
Las páginas deben estar bien organizadas.

La descarga de las páginas tiene que ser rápida. Para ello, las imágenes y ficheros vinculados tienen que tener poco peso y han de estar bien etiquetadas.
La tecnología empleada no tiene que ser una barrera de entrada para nadie. Es importante que las páginas web tengan accesibilidad. La Wikipedia define la accesiblidad como "la capacidad de acceso a la web de los contenidos por todas la personas, independiemtemente de la discapacidad que presenten".
Así pues, la usabilidad nos permite disfrutar de una serie de beneficios:
Facilita el aprendizaje.
Logra que aumente el número de visitantes y clientes de una página web.
Mejora la imagen y el prestigio del sitio web.
Reduce el estrés, incrementa la satisfacción y la productividad. Por tanto, se consigue mejorar la calidad de vida de los usuarios.

Reduce las pérdidas de tiempo y las tareas se realizan con mayor rapidez. En consecuencia, aumenta la productividad y se redocuen los costes.

Finalmente, destacamos una página web que cumple los requisitos de usabilidad: 'El Rellano' (http://www.elrellano.com/). Se trata de un espacio dedicado al humor en donde los visitantes pueden realizar infinidad de actividades como, por ejemplo, escuchar grabaciones de sonido, jugar, ver vídeos o imágenes, etc. Además, los usuarios también pueden publicar sus propios proyectos.Es una página que tiene una estética bastante atractiva, los contenidos están organizados en diversas pestañas desplegables y no es difícil descargarse imágenes, sonidos o vídeos. Además, al tratarse de una página de humor, incrementa el nivel de satisfacción del usuario. Sin lugar a dudas, 'El Rellano' se ha convertido en un sitio web bastante popular no sólo por sus contenidos, sino también por las facilidades que ofrece para acceder a cualquiera de sus secciones.

A MODO DE CURIOSIDAD:
http://www.usalo.es
http://es.wikipedia.org/wiki/Usabilidad

domingo, 2 de diciembre de 2007

Lennon y Ramos.....ya están aquí....



Gonzo (Ramos) y Taxman (Lennon)


Amedo y Max Cady


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(Imágen cedida por Tocayo Kane, creado en El hijo del puntal Estudio. Gracias compañero)

sábado, 1 de diciembre de 2007

Bruce Springsteen - Born to run




Servido aún recuerda el día que vió por primera vez a Springsteen en vivo con la E Street Band. Fué una noche de octubre, por televisión, el día que la MTV emitía en directo el concierto que el Boss daba en el Palau Sant Jordi para presentar su excelente trabajo "The rising".
Jamás lo olvidaré; desde el salón de mi casa pude comprender la grandeza del rock bien hecho, de las letras bien escritas, de la conexión que se puede crear entre artista y público, de lo justificado que está el mito de Springsteen. Un concierto redondo, inolvidable, excelso, una experiencia nueva que cambió por completo mi visión sobre los espectaculos en vivo: "tengo que ver todos los conciertos que pueda".
Pues bien, tras unos años, y unos cuantos conciertos, puedo decir que, cruzando los dedos porque no pase nada, el día 19 de julio de 2008 estaré en el concierto que Bruce Springsteen ofrecerá en el Camp Nou como parte de su gira "Magic".
La odisea para conseguir las entradas fue inolvidable, pero al fin mis amigos Jesús y Gonzo me acompañarán en el que, espero, sea la confirmación de un sueño que comenzó aquella tarde de octubre, la posibilidad de ver la grandeza de un concierto de Bruce Springsteen y la E Street Band.

Utilizando como excusa este acontecimiento hablaré del que es, a mi entender, la obra maestra de Springsteen: "Born to run".
Con una perfecta producción por parte de Jon Landau, Mike Appel y el mismo Bruce y publicado en 1975, son ocho las canciones que componen uno de los discos más importantes, conseguidos, épicos e inmensos de la extensa carrera del estadounidense.

Canciones:


1ª - "Thunder Road": menuda forma de comenzar un álbum...una de las tres mejores canciones de la carrera de Springsteen es la encargada de dar el pistoletazo de salida al disco. En apena 4 minutos y 50 segundos, se dejan claras las características que van a recorrer cada uno de los rincones del trabajo: interpretaciones vocales inmensas por parte del Boss, trabajo sublime de la E Street Band, maravillosas letras, producción épica y grandilocuente y melodías perfectas. Comenzando con un melancólico piano y terminando con uno de los finales más emblemáticos que ha sido capaz de crear Springsteen, "Thunder road" es la mejor manera de comenzar el álbum, un clásico a la altura de la leyenda, una obra maestra sin ningún "pero", una CANCIÓN con mayúsculas.

2ª - "Tenth Avenure Freeze - Out": que importante es la melodía en una canción. De ella depende la mayoría de logros del resto de factores. Pues bien, este segundo tema del disco es una muestra de esto. Melodía brillante, con reminiscencias claras al sonido Motown, incluso con toques R&B, que se sirve además de una voz de Springsteen en estado de gracia constante, capaz de dotar de fuerza y elegancia complementarias a todo un tema que es, como todo el álbum, una auténtica delicia.

3ª - "Night": paso a la E Street Band por favor. Rock en estado puro, en un tercer tema en el que se destapa el tarro de las esencias de la banda que acompaña a Springsteen en sus mejores momentos. Pasando por un inspiradísimo Roy Bittan en los teclados y un excelento Max M. Weinberg en la batería hasta un siempre inmenso Clarence Clemons en el saxo, la E Street Band demuestra toda su fuerza, capacidad y grandeza en otra obra maestra, otra muestra del mejor rock and roll, renovado de la mano de Bruce Springsteen.

4ª - "Backstreets": debo admitir que siento muchísima debilidad por esta canción, y es que me parece una de las cosas más grandiosas, inspiradas y emocionantes que ha dado la carrera de Springsteen, y consecuentemente la historia de la música. Todo es excelente en una canción redonda, desde el delicioso teclado que inicia el tema hasta el "hiding on the backstreets" que lo cierra. Mención aparte merecen dos elementos que están mucho más allá de la alabanza; por una parte la labor de Bittan en los teclados, excelente, emocionante y asombrosa, y por otra la interpretación vocal de Springsteen, para servidor, la mejor de su carrera. Escuchar como canta el estribillo, como se desgarra la voz en cada sílaba, con que intensidad vive el tema. Uno de los puntos más altos del discos y de la carrera del norteamericano.

5ª - "Born to run": cuando todavía nos estamos recuperando de la sublime "Backstreets" aparece el tema homónimo del álbum y no podemos más que rendirnos ante la evidencia de la grandeza inalcanzable del genio nacido en New Jersey. Partiendo de una letra maravillosa y acompañandose de una labor impresionante por parte de la E Street Band (la energética batería de Ernest Carter, los inolvidables teclados de David Sancious, el excelente órgano de Danny Federici, el inmenso bajo de Garry Tallent y, por supuesto, el inolvidable saxo de Clemons), Springsteen nos ofrece en apenas 4 minutos y medio una clase magistral de rock bien hecho, de genialidad absoluta, de grandeza, de épica, de música. Posiblemente la mejor canción de su carrera.

6ª - "She,s the one": grandiosa en vivo, este sexto tema del disco constituye una ración de pop/rock memorable. De nuevo es necesario destacar la labor de la E Street Band, capaz de engrandecer temas que son, de por si, joyas. Maravillosa interpretación vocal de Springsteen que redondea un tema que es ya un clásico y que, como he dicho anteriormente, crece muchísimo en directo. Imprescindible.

7ª - "Meeting across the river": el jefe se pone melancólico. En esta ocasión, Springsteen, se deja llevar por un estilo pausado, tranquilo, que bebe directamente de estilos como el blues y, muy especialmente, el jazz. Con elementos tan brillantes como el teclado de Bitta y, sobre todo, una ominpresente, sublime y elegante trompeta de Randy Brecker, "Meeting across the river" es una relajada joya que sirve como ejemplo de la cara más baladista del Jefe.

8ª - "Jungleland": esto es una obra maestra. Tan simple y tan complejo a la vez. Esto es una joya, una muestra de fuerza, precisión, majestuosidad y grandeza al alcanza de muy pocos, o ninguno. Springsteen se guarda para el final del disco un tema tan enorme que cuesta comentarlo. De nuevo se parte de la que es, para servidor, la mejor letra que ha escrito el genio americano, pero que encuentra en la melodía y en la interpretación de Bruce y la E Street Band algo más que complementos. La labor de la banda que acompaña al Boss merece un lugar más que destacado. El bajo de Garry Tallent es inmenso, la batería de Max W. Weinberg asombrosa y el piano de Roy Bittan sencillamente increible, pero de nuevo hay que destacar la labor de Clarence Clemons en el saxo; su interpretación es excelente, hipnotizadora y sublime, alcanzando su cima en un solo grandioso que pasa directamente a la posteridad. Por su parte, Springsteen ofrece una interpretación vocal emocionante, excelsa, maravillosa que no hace mas que engrandecer una de las grandes obras maestras de la historia de la música. 9 minutos y medio de pura música.




"Born to run" es más que un disco. Son muchas cosas: un conjunto de temas emblemáticos, una cima en la carrera de una leyenda, un hito para la historia de la música, una leyenda, una genialidad, una obra maestra, la muestra más clara de la grandeza del Jefe, del Boss, del mito viviente, Bruce Springsteen.
Y es que pase lo que pase, siempre tendremos la sensación de que todos, absolutamente todos, hemos nacido para correr. Para correr al lado de Springsteen.
























Taxman

domingo, 25 de noviembre de 2007

Rufus en Cartagena





Espero no resultar excesivamente pesado, pero es que cada vez que encuentro algún nuevo vídeo de el señor Rufus Wainwright en su concierto en Cartagena, acompañado de una crónica entusiasta por parte de algún compañero/a de vivencias, siento la necesidad de compartirlo, de intentar haceros partícipes de lo que se vivió en ese Teatro en el, ya inolvidable, 9 de noviembre.
En esta ocasión os dejo parte de las actuaciones de la espléndida "Going to a town" y de la maravillosa versión de "Somewhere over the rainbow"...viéndolas aún no consigo creerme que estuviera allí. Espero que os emocionen, al menos, la mitad que a mi.
Señoras y señores, de nuevo os dejo con el genio en Cartagena.




"Going to a town"









"Somewhere over the rainbow"

lunes, 19 de noviembre de 2007

"Across the universe"


4 de enero del 2008. Fecha de estreno en España de "Across the universe", musical ambientado en la época de los 60 - 70 con total protagonismo de las canciones de The Beatles. La película que soñé, la película que necesitaba, la película que, sin verla, ya me emociona. Aquí os dejo el trailer de la misma, y la versión de "Let it be" que aparece en la película...maravillosa, deslumbrante, emocionante, inolvidable.

Nos vemos en el cine.









domingo, 18 de noviembre de 2007

Rufus Wainwright - Hallelujah

“Hallelujah”, canción compuesta por el maestro Leonard Cohen ya fue versionada por el malogrado Jeff Buckley en el histórico e imprescindible “Grace”, uno de los mejores discos de los noventa, una revisión estremecedora, melancólica y oscura que constituye una de las mejores canciones de la última década; pero fue el señor Rufus Wainwright quien sintió, interpretó y cantó esta canción de manera única e inolvidable, creando la versión definitiva. Triste, abrumadora, simple, grandiosa, inolvidable, y absolutamente bella, “Hallelujah” se podría considerar, sin miedo al exceso, una de las mejores versiones de la historia. Un consejo, escucharla, no la oigais, simplemente escucharla, dejaros llevar por la voz de Wainwright, hipnotizar por la melodía, emocionarse con sus palabras. Sentirla. Merece la pena.

Esta entrada, el sentimiento que me crea esta canción, las lágrimas que provoca en mis ojos, el escalofrío que recorre mi espalda al escucharla, es para ti. Por nuestro amanecer en París al ritmo de este piano, tan suyo como tuyo, tan tuyo como mío, por los sueños que no se cumplieron, por la sensación de sentirme lleno estando vacío, por las cosas que no pasaron, por los recuerdos que solo yo recordaré, por los holas que no acompañaron al adiós, por que esta canción es la banda sonora que quiero que tenga nuestra historia, con principio, sin final, con tortura, con soledad, con compañía, con poesías, con besos, con caricias, con un “volveré”, con un reencuentro imposible, con un reflejo, con una mirada, con unos ojos que no olvidaré, con una noche que acompañará cada uno de mis días, con una sonrisa que, durando tan poco, me acompañará siempre. No olvidaré nuestra mañana con Rufus sonando de fondo, no se cuanto duró, quizás toda una vida. Gracias por todo. Por si acaso, no cierro la puerta desde la cual te pregunté si volverías y tu, tan preciosa como siempre, me decías: claro…y sentí que no volvería a tener miedo a sentirme solo. Gracias por la compañía que me hará ese momento siempre…dejo la puerta entreabierta…te espero dentro…¿volverás?…Hallelujah…

domingo, 11 de noviembre de 2007



Rufus Wainwright en su concierto en Cartagena

Aquí os dejo la crónica escrita por Jam Albarracín para "La Verdad" del concierto de Rufus Wainwright, a mi entender una de las mejores críticas que he leido y capaz de explicar, lo máximo posible, la experiencia que vivimos todos los que el viernes 9 de noviembre acudimos al mejor concierto de nuestras vidas. Sin más comentarios os dejo con esta espléndida crónica.


27 FESTIVAL DE JAZZ DE CARTAGENA
11.11.07

DIOS EXISTE


La Verdad tuvo el inmenso placer de presentar, dentro de la 27 edición del Jazz Cartagena, a Rufus Wainwright. La velada que más expectación había despertado del festival -sin localidades desde hace una semana- desbordó hasta las previsiones más optimistas. Un espectáculo soberbio. Una de esas noches que, dentro de unos años, uno podrá recordar con orgullo: yo estuve allí. El del viernes fue, sencillamente y la duda ofende, el mejor concierto del año. Probablemente del lustro, quién sabe si de la década. Esta vez sí, vale agotar los superlativos. Dios existe. Ni Stones, ni Dylan, ni Springsteen: Rufus Wainwright.

La propuesta del canadiense de Nueva York tiene la majestuosidad de la ópera, la exuberancia del musical de Broadway, el poder melódico del pop, la suavidad del folk-rock, el aroma de libertad del singer-songwritter, la revelación del soul, la lujuria del cabaret. Todo ello esgrimido con un grado de calidad, originalidad y magnetismo insólitos: Rufus no seduce, directamente enamora. Desde el primer minuto de la primera canción -ahí es nada empezar con una melodía tan complicada como la de Release the stars, aunque en realidad todas lo son- y hasta el último de los bises, todo es absolutamente delicioso.

Su sentido del espectáculo es abrumador. La estética, la exactitud técnica, la gracia en la comunicación, la generosidad -más de dos horas de concierto-, el repertorio... Todo está cuidado con tanto mimo que justifica las caras de éxtasis del público a la salida. Lástima no haber llevado una cámara de fotos. El sonido, los músicos y la puesta en escena son magníficos, pero la línea de meta revela este podio: Wainwright, Wainwright y Wainwright: su voz, sus composiciones, su poder de fascinación.

El concierto fue ameno y muy variado. Con mayoría de canciones de su flamante nueva entrega, Release the stars -Do i disappoint you erizó la piel y Beetween my legs es la mejor canción pop de 2007-, pero con títulos de toda su discografía, desde Danny boy -de su primer álbum de 1998-, hasta Cigarettes and chocolate milk o esa maravilla coral que es 14th street, con la que cerró la segunda parte de un show que comenzó tocado con traje de rayas rojiblancas salpicado por tremendos broches brillantes, continuó vestido de boy-scout y casi finalizó en albornoz blanco, cantando junto al piano de mamá (literal, no es una frase hecha). Digo casi porque aún quedaba el simpático momento transformer final, joyas, tacones y lápiz de labios incluidos. Con faldas y a lo loco.

Todo en Rufus Wainwright es superlativo. Dramático, impresionante, barroco, desmesurado. Pero lo más excesivo es su devastadora calidad, su genialidad indudable. Y de eso, fruta escasa, es imposible empacharse. La del viernes fue una de esas veladas en las que uno se congratula con la música, con el arte y con la vida. Menos mal que existen.


Jam Albarracín

sábado, 10 de noviembre de 2007

Rufus Wainwright




La mejor experiencia musical de mi vida. Uno de los momentos más emocionantes que esta persona ha vivido. Una de esas cosas que se saben inolvidables mientras están ocurriendo. Estas son algunas de las definiciones que se pueden aceptar como válidas para, intentar, explicar lo que fue el concierto más maravilloso, redondo, conseguido, apasionado, fascinante y absolutamente emocional que he visto. Rufus Wainwright en el Teatro Circo de Cartagena. Nadie sabe aún como consiguieron traerlo, como un genio de su talla se acercaba a esta pequeña ciudad de la Región, pero eso es lo de menos, lo importante es que estaba aquí y que nos ofreció algo que no olvidaremos nunca. Con una puntualidad ejemplar (21:30 en punto) aparecieron en escena los 6 miembros de la banda más impresionante que uno se puede encontrar. Perfectos en unos coros celestiales, sublimes, y con una capacidad instrumental apabullante, la banda que acompaña a Rufus se complementa y entiende su música, se adapta a un estilo único, demuestran su excelencia, y ponen toda su capacidad al servicio del genio americano.





Y que genio...comenzando con una increible "Release the stars" a la que siguió la maravillosa "Going to a town", un clásico, Rufus fue desgranando, principalmente, los temas de su último trabajo, el homónimo "Release the stars", el mejor disco de su carrera tras esa obra maestra absoluta que es "Want one". Tras ofrecer unas sublimes "Rules and regulations" y "Sansoucci", ´Wainwright avisó al público, al cual no dejó de hablar durante todo el show de manera cercana, sincera y especial, de que la siguiente parte del espectáculo estaría centrada en sus trabajos anteriores, y comenzó con uno de los temas de su primer trabajo, la excepcional "Danny Boy" a la que siguió el mejor tema del primer set, una melancólica y cautivadora versión, Rufus ayudado únicamente de su piano y su voz,de esa obra maestra que es "Cigarettes and chocolate and milk" del exquisito "Poses". Inmediatamente después una "The art teacher" que nos dejó a todos hipnotizados ponía punto y final a una parte del concierto más que memorable. Rufus señaló entonces que tocarían una canción más y se tomarían un pequeño descanso, la canción elegida fue una brillante "Between my legs" cantada con la ayuda de una espectadora que subió al escenario para ayudar al genio. De esta manera simpática terminaba la primera y fascinante primera parte del concierto.





Nadie ni nada nos podrían haber avisado de lo que estabamos a punto de ver, de escuchar, de sentir, en el segundo segmento del show. Redondo, sublime, maravilloso,etc., varios son los adjetivos que se pueden conceder a 2 horas de pura música, de genialidad desbordante. Comenzando con una absolutamente magistral "The consort", Rufus ofreció todo lo que puede ofrecer, que es tanto, tanto, que intentar explicarlo con palabras es algo difícil, casi imposible. Con un constante nudo en la garganta, con los pelos de punta durante cada una de las canciones y con los ojos iluminados siguió servidor esta parte del show. A través de el se fueron sucediendo obras maestras como "Not ready to love", "Leaving for Paris" o "Tiegarten".Pero dentro de un concierto que fue totalmente inolvidable, hubo ocasiones que merecen una mención especial, como por ejemplo la ocasión en la que Rufus invitó a su madre a tocar cuatro temas, entre los que destacan una maravillosa "Barcelona" y, sobre todo, una inolvidable versión del "Somewhere over the rainbow" de Judy Garland. O uno de los momentos más mágicos que he vivido en mi vida, la interpretación de Rufus y su banda, totalmente a capella de una tradicional canción irlandesa llamada "Mocushla", sin palabras. También merecen un lugar destacado en esta crónica la apabullante versión de "Do i dissapoint you", de las más aplaudidas, la increible "Beautiful child", acompañada de palmas "españolas", como pidió el mismo Rufus, la sublime "Slideshow" que dejó a todo el mundo con la boca abierta, o la canción con la que cerró el segundo tramo del concierto, la obra maestra "14th street" en la cual se presentaron cada uno de los miembros de la banda con un solo de cada uno de sus instrumentos en lo que fue una de las demostraciones de virtuosismo más grande que se pueden ver en la actualidad. Nuevo punto y seguido.

Ya solo quedaba la tercera y última parte del concierto, en la cual Rufus apareció vestido con un impecable albornoz blanco con el cual se sentó en el piano para ofrecer una increible versión de la maravillosa "I don,t know what it is", a la que siguió una íntima y mágica "Poses" (cuando Rufus se queda a solas con el piano el silencio y el sentimiento que recorre cada uno de los rincones del teatro es, sencillamente, único). Y para el final, el gran final, el genio americano se sentó frente a la primera fila, en un pequeño taburete, fue secándose las orejas y colocándose en cada una de ellas unos espectaculares pendientes de diamantes, después se pintó los labios de un color rojo pasión y ,por último, se colocó unos zapatos de tacón imposibles con los cuales se dirigió al fondo del escenario.
Lo que ocurrió después solo se puede explicar estando allí, viéndolo. Todos los componentes de la banda aparecieron vestidos de traje, mientras Rufus se quitaba su albornoz y mostraba un..espectacular vestido corto negro, salido directamente del armario de su amada Judy Garland. Él y su banda ofrecieron entonces un inolvidable número musical, "Get happy", en el cual se sucedieron pasos de baile imposibles y gestos delirantes que hicieron que el teatro entero se pusiera en pie. Con el público totalmente entregado, en éxtasis permanente, Rufus concluyó su show con una brillante "Gay messiah", maravilloso punto y final a un espectáculo indescriptible.





3 horas de concierto. 3 horas con la mejor voz del mundo (en directo es algo apabullante). 3 horas de genialidad. Servidor nunca ha estado tan cerca de un genio. Nunca ha vivido algo así.Todo lo que escriba será en vano, porque un concierto de Rufus Wainwright es algo que hay que ver, que hay que disfrutar, que hay que sentir. Unas 13 horas después de que los aplausos dieran por concluido el concierto, no he podido olvidar su voz, no he podido dejar de sentir algo especial, una sensación permanente de saber que he vivido algo que nunca olvidaré. El genio pisó Cartagena. Enamoró a un Teatro Circo lleno. Fascinó a todo un público entregado. Emocionó hasta un punto extremo. Nos hizo olvidar problemas, dudas, amores, desamores, situaciones...Hizo desaparecer todo dejándonos con la mejor de las compañías: su voz, su presencia, sus canciones, sus palabras, su sinceridad, su humildad, su extravagancia, su exageración, su pura y dura genialidad. Rufus Wainwright ofreció el que será el concierto más especial de mi vida. Puede que vaya a mejores, pero no más emocionantes, más especiales. Fue algo único e irrepetible. Que concierto...cuando alguien demuestra estar más allá, mucho más allá de las palabras, de la alabanza...en el punto justo de la emoción...GENIO con mayúsculas....Rufus Wainwright.





El GENIO y yo




"Beautiful child" interpretada en el Teatro Circo de Cartagena, un ejemplo de lo espectacular que fue todo.



La increible "Cigarettes and chocolate milk"






"Somewhere over the rainbow"...no más palabras


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Esa obra maestra llamada "Going to a town"




"Gay Messiah", el tema con el que se despidió




"Mocushla". Capella. Como dijo la persona que me acompañaba: "esto es música".




La maravillosa "14 th street"





Rufus y la banda que le acompañó en el Teatro Crico. Canción con la que comenzó el concierto, "Release the stars"

lunes, 5 de noviembre de 2007

viernes, 2 de noviembre de 2007

George Harrison - All things must pass




En la mayoría de mis críticas aparecen dos palabras que conforman un único término: obra maestra. Pero, ¿qué es, exactamente, una obra maestra? Difícil respuesta. Supongo que cada persona tiene una opinión personal sobre el verdadero valor del concepto y lo que significa. Para dejar las cosas claras desde el comienzo, diré que para mi una obra maestra es algo incapaz de explicar, algo que te emocione, que cree en ti algún tipo de sentimiento que te resulte familiar sin serlo, que sepas desde un primer momento que te va a acompañar siempre, que consiga hacerte llorar, sonreir, etc. Para mi una obra maestra es el trabajo de un genio, de una persona capaz de crear algo tan enorme que, mientras por un lado te parece algo tan grande, tan enorme y tan espectacular, sientes que está hecho solo para ti, únicamente para que lo disfrutes tu, que está contado, cantado, escrito, compuesto para ti.

Pocas obras son tan redondas, tan geniales, tan espectaculares, tan sumamente sencillas en su grandeza como "All things must pass". Pocos trabajos musicales tienen esa capacidad de atraparte a la primera nota, de guiarte en un laberinto de sentimientos que suenan tan, tan sinceros como los que, con una voz preciosa en el aspecto más literal del término, transmite George Harrison en este, su disco más conseguido, tras la separación de los Beatles.

Harrison siempre fue el genio en la sombra, el guitarrista que escondia su grandeza tras las emocionadas notas de una guitarra, empequeñecida por lo gigante del carácter y destreza de los dos mejores compositores de la Historia, los señores John Lennon y Paul McCartney. Tras ellos se encontraba la que era, seguramente, la personalidad más normal, tranquila y sencilla, de los cuatro fabulosos de Liverpool, pero no solo eso, sino también la pura inspiración del que, para servidor, es el gran genio desconocido de la Historia de la música.

En su etapa beatle se destapó pocas veces, pero siempre aprovechó su oportunidad, sobre todo en sus últimas composiciones dentro del cuarteto. Si "Don,t bother me" era una aceptable canción pop que se ganó justamente un lugar en la cara A del segundo trabajo de los Beatles, sus siguientes canciones fueron demostrando la evolución natural de Harrison. La maravillosa "I need you" y la notable "You like me too much" fueron su aportación para el disco "Help!", tras ellas llegaron la estupendas "Think for yourself" y "If you needed someone", dos de las mejores canciones de "Rubber soul", la innovadora "Love you to" y la conseguidísima "I want to tell you" dentro del álbum "Revolver" y la oscura e hipnotizante "Within you, without you", la canción que abría la cara B de esa obra maestra llamada "Sgt. Peppers Lonely Hearts Club Band". Dentro de la época más psicodélica del grupo, Harrison ofreció sus temas menos conseguidos,como son "Only a norther song", "It,s all too much" o "Blue Jay Way". Compuso también las caras b de dos de los singles de los Beatles, las notables "Old brown shoe" y "The inner light". Pero fue en la época más complicada del grupo cuando Harrison comenzó a demostrar su más alto nivel. Suya es la mejor canción del espectacular ábum doble que el cuarteto lanzó en 1.968, llamado "The Beatles", pero más conocido como "White Album". Se trata de "While my guitar gently weeps", una canción profunda, sentida y enorme, verdadera cima del trabajo. En el segundo cd, Harrison también regalaba una joya escondida llena de sentimiento llamada "Long, long, long". Para finalizar su etapa beatle, George se permitió el lujo de componer dos obras maestras absolutas que se encontraban dentro del mejor disco del grupo, "Abbey Road", consiguiendo así que sus temas fueran el punto alto de un trabajo discográfico de ese tamaño. "Something" y "Here comes the sun" suelen estar en permanente estado de competición entre los beatlemaniacos, que se enfrentan entre ellos para elegir cual de las dos es la mejor aportación de Harrison al grupo. Servidor no puede elegir, así que se queda con dos de las mayores joyas que nos ha regalado la música. Dentro de "Let it be", último álbum publicado del cuarteto de Liverpool, George, aportó dos nuevas canciones, la maravillosa "I, me, mine", canción por descubrir, y la simpática "For you blue".

Tras este último disco los Beatles se separaron. Quedaba por delante la publicación de los cuatro primeros trabajos en solitarios de Lennon, McCartney, Harrison y Starr. Y el resultado fue, cuanto menos, esperanzador. John creó una obra áspera, íntima, sincera y desgarrada, el espectacular "Plastic Ono Band", Paul publicó un artesanal y emocionante trabajo, muy infravalorado al principio, llamado, simplemente, "McCartney", y Ringo sorprendió a todos con un tremendamente conseguido álbum lleno de impresionantes colaboraciones llamado "Ringo". ¿Y qué hizo George Harrison?. Pues componer el que, con el paso del tiempo, confirmó lo que ya se intuía cuando apareció en las tiendas, el mejor disco de un Beatle en solitario y una de las obras musicales más redondas de la historia: "All things must pass".


CD 1

1ª - "I,d have you anytime": compuesta mano a mano con el maestro Bob Dylan que prestaba la letra, Harrison abre el primero de los discos de manera relajada, llenando nuestros sonidos de una paz y tranquilidad a la que ayuda, y de que manera, una voz estupenda y unas guitarras serenas y brillantes. Puede que no esté al nivel del resto de las canciones,pero a pesar de eso, este primer tema es la manera perfecta de comenzar un álbum que se intuye emocionante.

2ª - "My sweet lord": apenas 10 líneas de letra son suficientes para que Harrison ofrezca uno de los grandes clásicos de la música popular, un emocionante himno, lleno de maravillosas guitarras (tanto acústicas como eléctricas), de brillantes coros, con una producción perfecta por parte de Phil Spector, otro de los grandes responsables de que "All things must pass" sea la genialidad que es. George desgarra la voz, llena de sentimiento una canción que debe ser considerada, si aún no lo es, uno de los mayores logros musicales que se han creado.

3ª - "Wah - wah": rabiosa muestra del mejor rock, Harrison demuestra en este tercer tema una capacidad para crear sucios riffs capaces de ser el elemento a través del cual giran toda una serie de factores (genial voz y coros, impresionante acompañamiento orquestal y grandiosas guitarras) que conforman una joya tan impresionante como esta crítica a sus años Beatle. Imprescindible.

4ª - "Isn,t it a pity": y llegó la cima. Antes de nada, debo admitir que este tema me parece la mejor canción que compuso el señor George Harrison en su etapa en solitario, y quizás en su etapa beatle. Todo en ella funciona, desde una capacidad instrumental llena de aciertos perfectos,esos teclados, esas guitarras que están más allá de la alabanza; esa voz llena de intensidad escondida tras la sutileza, de sencillez llena de emoción; ese final tremendo, absolutamente tremendo, lleno de épica, de inspiración, de puro sentimiento. Sin duda, la demostración más absoluta de la genialidad que podía alcanzar Harrison.

5ª - "What is life": nos encontramos ante el que es, a mi parecer, uno de los mejores riffs de guitarra jamás compuestos. Lleno de energía y de brillantez, el quinto tema del disco es una muestra del mejor pop, una joya totalmente redonda donde la preciosa letra, la maravillosa interpretación de Harrison y el perfecto papel de cada uno de los instrumentos (especialmente una guitarra en permanente estado de gracia)no hace más que coronar la que es una de las grandes canciones del repertorio Harrison. Un clásico instantáneo.

6ª - "If not for you": también hay lugar en este trabajo para un revisión por parte de George a uno de los grandes temas del antes mencionado Bob Dylan. Bellísima versión que consigue superar con creces a la original gracias, sobre todo, a una maravillosa interpretación vocal por parte de Harrison.

7ª - "Behind that locked door": nueva balada llena de sentimiento, con una guitarra preciosa y precisa, donde de nuevo se debe alabar la voz de un Harrison que demuestra a lo largo de todo el disco, que tenía una de las voces más personales y bonitas, en el mejor de los significados posibles, de la historia del pop. Atención también a unos coros sublimes que redondean otra de las grandes canciones del trabajo.

8ª - "Let it down": otro de los clásicos más reconocidos de este disco es esta maravillosa canción dividida claramente en dos sectores a cual mejor. Por una parte tenemos unas estrofas llenas de una extraña, hipnotizante y oscura melodía que nos lleva, casi sin darnos cuenta, a un estribillo rabioso y lleno de fuerza. Un poderoso tema, perfecto en todos sus elementos.

9ª - "Run of the mill": para cerrar el primero de los cds, Harrison se guarda una de sus mejores baladas, estructurada sobre todo en una de las letras más conseguidas que jamás escribiera el genio inglés. Estupendos los acompañamientos orquestales que ayudan a llenar de emoción una brillante interpretación vocal en la que George suena tan sincero y profundo como de costumbre. Uno de los mejores temas del trabajo, y perfecto punto y seguido.


CD 2

1ª - "Beware of darkness": el segundo de los cds comienza con una nueva joya. Canción redonda que le debe la mayor parte de su éxito musical a una producción de Spector capaz de crear un ambiente melancólico y bello al que hay que sumar una genial voz de Harrison y uno de los mejores middle eight de todo el trabajo. Mención aparte merece un solo de guitarra genial, grandioso, lleno de fuerza y sentimiento. Una auténtica maravilla.

2ª - "Apple scruffs": acelerado tema acústico con claras influencias dylanianas, que cuenta como elementos claves con un inspirado riff de harmónica,unos preciosos coros, y un estribillo bastante contagioso. Tema menor dentro de un trabajo gigantesco, es decir, canción que bastantes compositores matarían por tener.

3ª - "Ballad of Sir Frankie Crisp (Let it roll)": seguramente nos encontramos ante uno de los mejores temas de Harrison, y a la vez, uno de los que menos repercusión alcanzó. Una de esas baladas eternas, llena de factores que la elevan entre las demás, eso y mucho más es esta "Ballad of Sir Frankie Crisp"; Harrison no canta mejor que nunca, sino tan bien como siempre, la producción es absolutamente genial y contiene unos teclados maravillosos; estos son, simplemente, algunos de los pilares sobre los que se asenta una de esas canciones imprescindibles.

4ª - "Awaiting on you all": canción centrada, básicamente, en la religión, tema que aparece constántemente a lo largo del trabajo, pero que se enfoca, en esta ocasión, en una melodía llena de nervio, y que se esconde tras una verdadera muestra del llamado "muro de sonido" que imprimía Spector a todas sus producciones. Brillante pop, sobrecargado pop, simple pop, en definitiva, puro pop, y del mejor.

5ª - "All things must pass": de nuevo es necesario arrodillarse y agradecerle a Harrison una canción. Pocas baladas tienen la capacidad evocadora, la grandeza y la emoción de "All things must pass". Partiendo de la base de que estamos ante una de las letras más redondas de George, brillante reflexión sobre el tiempo, nos encontramos ante un tema cuya belleza es tan grande que intentar describirla sería estúpido e innecesario. La voz de Harrison, en la que es la mejor interpretación vocal del álbum, nos canta todo con una humildad y con una sinceridad desgarradora, absolutamente inolvidable. Una canción para recordar siempre.

6ª - "I dig love": tema centrado en un genial riff a través del cual la melodía va creciendo hasta alcanzar un sobresaliente climax final, en el cual la estupenda voz de Harrison, una brillante percusión, un bajo grandioso y una guitarra acertadísima se unen para crear una nueva joya.

7ª - "Art of dying": maravillosa reflexión sobre la muerte, en este tema Harrison demuestra su capacidad como estupendo guitarrista y su constante pensamiento sobre temas universales. Llena de grandeza sonora, "Art of dying" es uno de los mejores temas rockeros que George compuso, y que se ayuda de unos metales asombrosos y una interpretación instrumental más que abrumadora, para convertirse en uno de esos clásicos a los que hay que acercarse para entender la grandeza de un genio como Harrison.

8ª - "Isn,t it a pity (Version two)": revisión del maravilloso tema que aparecía en el primero de los cds. Esta vez, Harrison se centra en eliminar todos los posibles arreglos épicos que tenía la primera de las versiones y desnudar el tema de manera que se puede apreciar la belleza absoluta del original. Melancólica, profunda, preciosa y tan genial como su primera versión, "Isn,t it a pity (Version Two)" quizás no aporte nada al trabajo, pero su escucha es siempre una auténtica y necesaria delicia.

9ª - "Hear me lord": y llegamos al final. Una nueva canción centrada en la religión, una nueva joya, otro tema redondo. Es esta otra de esas canciones donde todo está conseguido, donde se produce la magia de que todos los factores encajen a la perfección, incluidos unos coros llenos de sentimiento y una voz desgarrada y genial de Harrison, que ofrece de nuevo una de las mejores interpretaciones vocales de su carrera. A nivel instrumental es una nueva cima, contando con unos teclados asombrosos, una percusión brillante, y una guitarra escondida pero sublime en cada una de sus apariciones. En definitiva, una genialidad absoluta para poner punto y final a algo más que un gran trabajo.



No es que se pueda añadir poco más sobre "All things must pass", la cuestión es que no se debe añadir nada más. No se sabe si es cuestión de magia, cuestión de buena suerte, de buena racha o de inspiración momentánea, pero hay ocasiones en los que se dan todos los elementos para que se cree algo inmortal, algo que es un clásico antes, durante y después de su salida al mundo. Este es el trabajo de un genio, de alguien capaz de crear algo tan enorme que te hace sentir que, a pesar de ser algo que está construido para que lo escuche el mundo, sólo llega a tus oidos, que está escrito para ti, compuesto para ti, cantado para ti. Es el trabajo de George Harrison. Su discurso, su lema, su leyenda hecha música. Es la personalidad de una persona reflejada en unas melodías, letras y voces llenas de vida. Es la inmortalidad de un mortal. "All things must pass" es, simple y llánamente, una obra maestra.


Taxman


(Esta crítica no podía estar dedicada a otra persona que no fuera mi compañero de análisis musicales, Richi, porque gracias a el, me acerqué un poco más a una persona que ya era muy cercana, el señor George Harrison. Por sus consejos, por su ayuda, sus ánimos, su sabiduría, su confianza, su sinceridad y su amistad tan lejana como cercana, este artículo está enteramente dedicado a el, porque sin su apoyo seguramente, no me hubiera atrevido a enfrentarme a este disco. Si consigo que le parezca, al menos suficiente, me tomaré el trabajo por cumplido con creces. Un abrazo enorme para la persona que, llamándose Richi, mejor rima con Harrison.)

martes, 23 de octubre de 2007

U2 - The Joshua Tree



Que U2 es una de las bandas más grandes del mundo es algo que puede gustar o no, pero igualmente se trata de una cuestión obvia. Que U2 es uno de los mejores grupos que ha dado la historia del pop rock es algo que también se podría discutir, pero desde luego lo que es evidente es que estamos ante uno de los grandes fenómenos musicales y sociales de la última década. Y eso es gracias, en gran parte, a este trabajo que voy a analizar, ´"The Joshua Tree".


Pocas veces un disco ha mostrado una fuerza, una emotividad y una belleza tan extraña como este. Poblado de logros y de joyas es más que probable que estemos hablando del mejor disco de la carrera de U2 y su verdadera cima creativa, al igual que la confirmación de un sonido que ha marcado a varias generaciones de nuevos artistas (Arcade Fire, Coldplay, Keane o The Killers, por ejemplo).


Y es que el espectro sonoro que logran Bono (voz), The Edge (guitarra), Adam Clayton (bajo) y Larry Mullen Jr. (batería y percusión), la gama de emociones transmitidas con sus instrumentos y las sensaciones capaz de crear en el oyente es algo digno de experimentar.


Con una producción inmensa por parte de Brian Eno y Daniel Lanois, "The Joshua Tree" supone un antes y un después no solo en la carrera de U2, sino en el mundo de la música. Uno de los mejores discos de los 80, sin duda. Aquí están una a una las verdaderas protagonistas del éxito: las canciones.



1ª - "Where the streets have no name": considerada para muchos como una de las mejores canciones de la carrera del grupo, este primer tema conquista, y de que manera, desde la primera escucha. Con un inicio de una belleza gloriosa, con una guitarra en permanente estado de inspiración y con una interpretación vocal por parte de Bono que no acepta réplica ninguna, nos encontramos ante una de las grandes canciones del disco, un arranque espectacular que ya nos va dando pistas de la excelencia que se va a ir encontrando canción tras canción. Primera canción, primera obra maestra.


2ª - "I still haven,t found what i,m looking for": otro de los clásicos más reconocidos por crítica y público de U2. Y es que sin apenas tiempo para recuperarnos del primer tema, Bono y compañía nos plantan en las narices un tema pop de melodía insuperable, de interpretación emocionada y emocionante y de un sonido que consigue crear un climax sonoro perfecto. Bellísima canción considerada, justamente, un clásico.


3ª - "With or without you": poco se puede añadir a todo lo que se ha dicho sobre esta canción desde su publicación. Obra maestra absoluta, genialidad sin peros posibles, enorme se analice por donde se analice, profunda, sentida, perfecta, preciosa, un clásico instantáneo. Si alguien no la ha escuchado, por favor, hacerlo, es una de esas canciones por las que la música está considerada arte. La cima de U2.


4ª - "Bullet the blue sky": la cuarta canción del álbum se trata de una tétrica muestra del rock más oscuro, un ejemplo de como se debe crear una atmósfera a través de unos instrumentos (excelente trabajo de Clayton), ayudados por una de las voces con mayor capacidad de transmitir sentimientos de la historia de la música ( inconmesurable Bono). Un nuevo logro sonoro de la banda irlandesa.


5ª - "Running to stand still": tras la tenebrosa "Bullet the blue sky", U2 regala una nueva balada. Se trata de uno de los mejores temas del grupo, una excelente muestra del mejor pop acústico, y sobre todo, una nueva oportunidad para que Bono demuestre sus excelentes facultades vocales, guiando la canción hacia la grandeza más absoluta a través de agudos, graves y demás. El resto del grupo está a la altura, especialmente un Larry Mullen Jr., excelente en su labor de percusión. Una auténtica joya.


6ª - "Red hill mining town": el lado más pop de U2 sale a relucir en esta brillante canción que cuenta como puntos altos con unos coros más que apropiados, unos teclados geniales, un estribillo irresistible y una interpretación de Bono, de nuevo, que actúa como guinda de un tema absolutamente redondo.


7ª - "In God,s country": tema puramente pop/rock que cuenta con una protagonista principal capaz de eclipsar al resto: la guitarra de The Edge. Perfecta,precisa y apropiada en todos los momentos de la canción, el instrumento de The Edge llena de brillantez un tema que cuenta además con un estribillo enorme, perfecto para emocionar. 2: 56 de pura grandeza.


8ª - "Trip through your wires": canción con reminiscencias country, "Trip through your wires" es uno de los temas más sorprendentes del álbum. Llena de logros, desde la bateria de Larry Mullen Jr., pasando por unos teclados tan sencillos como acertados, una guitarra brillante, un bajo inspiradísimo, una harmónica inconfundible y una voz como la de Bono que vuelve a dar una clase de magistral de interpretación, este tema es otro de los puntos altos de un disco sin baches.


9ª - "One tree hill": nueva muestra de la capacidad de U2 para crear perfectos temas pop. Con una letra preciosa, una atmósfera sonora excelente (grandiosos teclados) y una interpretación sublime a todos los niveles, nos encontramos ante una de las grandes joyas del grupo irlandes, una muestra de lo hermosa que puede ser la música cuando suena sincera, grande, de verdad.


10ª - "Exit": a pesar de contar con un inicio que nos puede traer a la cabeza el estilo gospel, la penúltima canción del álbum se trata también de la canción más rockera de todo el trabajo. Oscurísima, asfixiante, inspirada, compleja e hipnotizante en el sentido más literal de la palabra, "Exit" es una canción arriesgada, difícil, pero con la que U2 vuelve a ganar, una vez más, la partida.


11ª - "Mothers of the disappeared": tras diez joyas solo falta saber si U2 echará el cierre con una canción a la altura. Y vaya si lo hacen. Gracias a un excelente climax sonoro, debido en gran parte a unos teclados tan brillantes como se han mostrado a lo largo de los temas anteriores, unas guitarras de The Edge llenas de sentimiento y belleza y, sobre todo, a una interpretación de Bono llena de sutileza y grandeza, "Mothers of the disappeared" es más que una joya, más que un clásico, se trata de la canción perfecta para cerra un trabajo perfecto.



Once temas redondos. Una voz inconfundible. Un sonido propio. Uno de los mejores discos de los 80 (admito opiniones que lo coloquen como el mejor). Uno de los trabajos musicales más importantes de las últimas dos décadas. Por discos como "The Joshua Tree", U2 debe ser considerada una de las bandas más grandes del mundo. Uno de los mejores grupos de la historia. Unos clásicos.




Taxman






Este primer análisis está dedicado a mi amigo y compañero Russel, ya que se trata del mayor fan de U2 que conozco. Seguro que el podría haber escrito este artículo mucho mejor, pero me conformo con que le parezca interesante. Para usted, por que se lo merece y es un placer dedicarselo a un buen amigo, este primer artículo. 1 abrazo.







viernes, 19 de octubre de 2007

Bienvenida

The Beatles, Elton John, Oasis, Coldplay, Robbie Williams, R.E.M, U2, Sabina, Dylan, Calamaro...Intentaré que todos ellos (y los que faltan) aparezcan en este blog gracias a sus trabajos más emblemáticos y a aquellas canciones que ya forma parte de la vida de tanta gente. Espero que este blog resulte lo más interesante posible y si consigue que alguien se acerque a alguno de los artistas que van a protagonizar artículso estaré más que satisfecho. Agradecido a todos aquellos que os habeis acercado a este rincón. Un saludo.