sábado, 9 de febrero de 2008

"Into the wild" - Gracias, Señor Vedder





Voy a intentar hablar del cantautor Eddie Vedder. No de su faceta como líder de Pearl Jam. No de su cara rockera, sino de su vena más acústica, simple y, porque no decirlo, emocionante.
Voy a intentar analizar un disco pequeño, de corta duración, pero grande y eterno a la vez.
Y dejo bien claro lo de "intentar" desde el comienzo porque es realmente complicado intentar explicar con palabras, en un texto, los sentimientos y, sobre todo, la sinceridad que transmite "Into the wild", banda sonora de la excelente película dirigida por el genio Sean Penn, que firma el, en esta ocasión cantautor, Eddie Vedder.

Nos encontramos ante la que es, posiblemente, la colección de canciones más sencillas y alejada de cualquier tipo de arreglo estruendoso que ha firmado uno de los grandes genios de los 90. 11 temas que no sobrepasan los 3 minutos como máximo, pero que son, todos y cada uno de ellos, una muestra de lo que unas cuantas guitarras y una voz pueden conseguir, la emoción absoluta.

1º - Settin forth

La canción elegida por Vedder para dar comienzo al disco es una potente muestra de folck/rock, eso si,más cercana al segundo de los géneros, que deja bien claras la estructura que va a latir permanentemente a lo largo de todo el trabajo, unas guitarras crujientes en la mejor línea del rock de los 70 y una voz en permanente estado de gracia, como muestra un estribillo en el que Vedder se lanza a por un agudo capaz de poner la piel de gallina a cualquiera con un mínimo de sensibilidad. Enorme comienzo.

2ª - No ceiling

Con simplemente un par de notas al principio, Vedder consigue hipnotizarnos en la que es una de las grandes canciones del disco (aunque, ¿cuál no lo es?). Con una percusión perfecta y precisa, unas guitarras que sirven de sublime guía para que la voz de Vedder viaje hasta llegar a otro estribillo arrebatador donde todos los elementos se abrazan para terminar de redondear una joya de apenas dos minutos de duración.

3ª - Far behind

Nos encontramos ante la que, probablemente, es la canción más rock del disco. De nuevo las guitarras juegan un papel más que importante en un tema donde la voz de Vedder se vuelve a mostrar robusta e incendiaria. Todo el tema se mueve, como he dicho, dentro de los parámetros del rock más clásico, pero también cuenta con un middle eight que juega con el pop hasta volver a caer en el épico estribillo, dentro de la sencillez que planea todo el trabajo, claro esta.

4ª - Rise

Vedder se guarda para el cuarto asalto una de las mejores canciones de su carrera. Utilizando simplemente un par de guitarras y su voz, el maestro nos sirve en bandeja de plata una emocionante muestra de sabiduría folck de apenas dos minutos y medio, donde todo suena verdadero, todo hipnotiza, todo emociona. Necesaria y clave dentro de la grandeza y espíritu del disco, esta "Rise" es una de esas cosas por las que merece la pena escuchar un album. Escuchar las melodías de las guitarras para entenderlo.

5ª - Long nights

Y es áquí, justo aquí, cuando ya no hay más excusas, no hay más vuelta de hoja, no hay más opción que catalogar a este disco de imprescindible. Llena de melancolía, sabiduría melódica y mucha, mucha, emoción, "Long nights" esconde una grandeza, una sinceridad, una épica de lo simple que la convierte en obra maestra, en una de las mejores canciones que ha creado Eddie Vedder. Toda explicación es poca ante las sensaciones que transmite este señor cuando canta eso de "I,m falling...i am falling..the lights go out..let me feel..i,m falling...i am falling safely to the ground..", en el que es, con justicia, uno de los estribillos más desgarradores que servidor ha escuchado en mucho, mucho tiempo.

6ª - Tuolumne

Vedder se toma un descanso en sus tareas como cantante y brinda un sublime instrumental protagonizado por una guitarra acústica que nos lleva directamente a la tranquilidad y belleza que puede desprender este maravilloso instrumento. Preciosa.

7ª - Hard sun

Y tras la calma...llega la tormenta. "Hard sun" es, sencillamente, una canción redonda. Todo en ella funciona; unas guitarras rabiosas y perfectas en sus funciones, una percusión precisa y que dota al conjunto de una grandeza que se palpa en cada nota. Pero mención aparte merece la voz de Vedder, enorme o grandiosa son dos buenos adjetivos que podrían definirla, pero es especialmente el momento en el que entona otro, desde ya mítico, estribillo en compañia de la preciosa voz de Corin Tucker cuando la canción llega al límite de la emoción. Memorable.

8ª - The wolf

Un nuevo instrumental en el que Vedder se deja su enorme voz acompañando a un lúgubre y melancólico teclado. Dos protagonistas. Un tema totalmente hipnótico.

9ª - End of the road

Precioso tema que sigue en la línea de todo el disco de mostrar a Vedder como brillante cantautor. Con una excelente introducción cantada, el tema se va convirtiendo poco a poco en un instrumental lleno de guitarras, escondidos pero precisos teclados y una elegante percusión; elementos, todos ellos, que forman una robusta pieza de melancolía rock.

10ª - Society

Este disco es tan redondo que no importa que, como en esta ocasión, se cuente con un estribillo tan simple y tópico, porque el resto de elementos (voz de Vedder, preciosos coros, brillantes guitarras, excelente solo) son suficiente para convertir en joya toda la canción. Una sublime muestra de emoción en formato acústico.

11ª - Guaranteed

Sensibilidad. Sinceridad. Belleza. Melancolía. Tristeza. Esperanza. Sabiduría. Melodía. Grandeza. Sencillez. Maestria. Emoción...todo eso, y mucho más es "Guaranteed". Escucharla. Es todo lo que alcanzo a decir.



Eddie Vedder nos ha hecho un regalo a todos los amantes de algo más que buena música, de la emoción. Cuando uno termina de escuchar "Into the wild" no quiere que acabe. Cuando las últimas notas que dibuja la preciosa guitarra de "Guaranteed" desaparecen uno siente que ha estado en un lugar diferente, en un rincón donde uno de los genios contemporáneos ha decidido olvidarse de las etiquetas, de los géneros musicales, de las listas de éxitos, y ha desnudado sus sentimientos para ofrecernos algo que está más allá de una melodía, la sinceridad.
Este no es un disco solo para escuchar, ni solo para disfrutar, sino para agradecer.
Así que este aprendiz de crítico solo le queda por decir: Gracias, Señor Vedder.


Taxman




"Long nights"



(Esta crítica va dedicada especialmente al señor Garrido, una persona que ama la música tanto como yo, que enseña tanto como aprende y que es, lo que se suele decir y pocas tan de verdad como esta, un GRAN amigo. Para usted, maestro, mi "homenaje" a Eddie Vedder)

1 comentario:

Jesús Garrido dijo...

Siempre he admirado a Eddie Vedder, me ha parecido uno de los mayores genios que ha dado el rock. Pero esto no me lo esperaba. Ya ha sido el culmen de su carrera, algo realmente maravilloso. Guaranteed es una de las mejores canciones que he oído en mi vida, tiene una melodía inigualable.

Gracias a ti, Taxman. Este disco me lo debes a mí, pero yo te debo muchos más. Gracias.