sábado, 1 de diciembre de 2007

Bruce Springsteen - Born to run




Servido aún recuerda el día que vió por primera vez a Springsteen en vivo con la E Street Band. Fué una noche de octubre, por televisión, el día que la MTV emitía en directo el concierto que el Boss daba en el Palau Sant Jordi para presentar su excelente trabajo "The rising".
Jamás lo olvidaré; desde el salón de mi casa pude comprender la grandeza del rock bien hecho, de las letras bien escritas, de la conexión que se puede crear entre artista y público, de lo justificado que está el mito de Springsteen. Un concierto redondo, inolvidable, excelso, una experiencia nueva que cambió por completo mi visión sobre los espectaculos en vivo: "tengo que ver todos los conciertos que pueda".
Pues bien, tras unos años, y unos cuantos conciertos, puedo decir que, cruzando los dedos porque no pase nada, el día 19 de julio de 2008 estaré en el concierto que Bruce Springsteen ofrecerá en el Camp Nou como parte de su gira "Magic".
La odisea para conseguir las entradas fue inolvidable, pero al fin mis amigos Jesús y Gonzo me acompañarán en el que, espero, sea la confirmación de un sueño que comenzó aquella tarde de octubre, la posibilidad de ver la grandeza de un concierto de Bruce Springsteen y la E Street Band.

Utilizando como excusa este acontecimiento hablaré del que es, a mi entender, la obra maestra de Springsteen: "Born to run".
Con una perfecta producción por parte de Jon Landau, Mike Appel y el mismo Bruce y publicado en 1975, son ocho las canciones que componen uno de los discos más importantes, conseguidos, épicos e inmensos de la extensa carrera del estadounidense.

Canciones:


1ª - "Thunder Road": menuda forma de comenzar un álbum...una de las tres mejores canciones de la carrera de Springsteen es la encargada de dar el pistoletazo de salida al disco. En apena 4 minutos y 50 segundos, se dejan claras las características que van a recorrer cada uno de los rincones del trabajo: interpretaciones vocales inmensas por parte del Boss, trabajo sublime de la E Street Band, maravillosas letras, producción épica y grandilocuente y melodías perfectas. Comenzando con un melancólico piano y terminando con uno de los finales más emblemáticos que ha sido capaz de crear Springsteen, "Thunder road" es la mejor manera de comenzar el álbum, un clásico a la altura de la leyenda, una obra maestra sin ningún "pero", una CANCIÓN con mayúsculas.

2ª - "Tenth Avenure Freeze - Out": que importante es la melodía en una canción. De ella depende la mayoría de logros del resto de factores. Pues bien, este segundo tema del disco es una muestra de esto. Melodía brillante, con reminiscencias claras al sonido Motown, incluso con toques R&B, que se sirve además de una voz de Springsteen en estado de gracia constante, capaz de dotar de fuerza y elegancia complementarias a todo un tema que es, como todo el álbum, una auténtica delicia.

3ª - "Night": paso a la E Street Band por favor. Rock en estado puro, en un tercer tema en el que se destapa el tarro de las esencias de la banda que acompaña a Springsteen en sus mejores momentos. Pasando por un inspiradísimo Roy Bittan en los teclados y un excelento Max M. Weinberg en la batería hasta un siempre inmenso Clarence Clemons en el saxo, la E Street Band demuestra toda su fuerza, capacidad y grandeza en otra obra maestra, otra muestra del mejor rock and roll, renovado de la mano de Bruce Springsteen.

4ª - "Backstreets": debo admitir que siento muchísima debilidad por esta canción, y es que me parece una de las cosas más grandiosas, inspiradas y emocionantes que ha dado la carrera de Springsteen, y consecuentemente la historia de la música. Todo es excelente en una canción redonda, desde el delicioso teclado que inicia el tema hasta el "hiding on the backstreets" que lo cierra. Mención aparte merecen dos elementos que están mucho más allá de la alabanza; por una parte la labor de Bittan en los teclados, excelente, emocionante y asombrosa, y por otra la interpretación vocal de Springsteen, para servidor, la mejor de su carrera. Escuchar como canta el estribillo, como se desgarra la voz en cada sílaba, con que intensidad vive el tema. Uno de los puntos más altos del discos y de la carrera del norteamericano.

5ª - "Born to run": cuando todavía nos estamos recuperando de la sublime "Backstreets" aparece el tema homónimo del álbum y no podemos más que rendirnos ante la evidencia de la grandeza inalcanzable del genio nacido en New Jersey. Partiendo de una letra maravillosa y acompañandose de una labor impresionante por parte de la E Street Band (la energética batería de Ernest Carter, los inolvidables teclados de David Sancious, el excelente órgano de Danny Federici, el inmenso bajo de Garry Tallent y, por supuesto, el inolvidable saxo de Clemons), Springsteen nos ofrece en apenas 4 minutos y medio una clase magistral de rock bien hecho, de genialidad absoluta, de grandeza, de épica, de música. Posiblemente la mejor canción de su carrera.

6ª - "She,s the one": grandiosa en vivo, este sexto tema del disco constituye una ración de pop/rock memorable. De nuevo es necesario destacar la labor de la E Street Band, capaz de engrandecer temas que son, de por si, joyas. Maravillosa interpretación vocal de Springsteen que redondea un tema que es ya un clásico y que, como he dicho anteriormente, crece muchísimo en directo. Imprescindible.

7ª - "Meeting across the river": el jefe se pone melancólico. En esta ocasión, Springsteen, se deja llevar por un estilo pausado, tranquilo, que bebe directamente de estilos como el blues y, muy especialmente, el jazz. Con elementos tan brillantes como el teclado de Bitta y, sobre todo, una ominpresente, sublime y elegante trompeta de Randy Brecker, "Meeting across the river" es una relajada joya que sirve como ejemplo de la cara más baladista del Jefe.

8ª - "Jungleland": esto es una obra maestra. Tan simple y tan complejo a la vez. Esto es una joya, una muestra de fuerza, precisión, majestuosidad y grandeza al alcanza de muy pocos, o ninguno. Springsteen se guarda para el final del disco un tema tan enorme que cuesta comentarlo. De nuevo se parte de la que es, para servidor, la mejor letra que ha escrito el genio americano, pero que encuentra en la melodía y en la interpretación de Bruce y la E Street Band algo más que complementos. La labor de la banda que acompaña al Boss merece un lugar más que destacado. El bajo de Garry Tallent es inmenso, la batería de Max W. Weinberg asombrosa y el piano de Roy Bittan sencillamente increible, pero de nuevo hay que destacar la labor de Clarence Clemons en el saxo; su interpretación es excelente, hipnotizadora y sublime, alcanzando su cima en un solo grandioso que pasa directamente a la posteridad. Por su parte, Springsteen ofrece una interpretación vocal emocionante, excelsa, maravillosa que no hace mas que engrandecer una de las grandes obras maestras de la historia de la música. 9 minutos y medio de pura música.




"Born to run" es más que un disco. Son muchas cosas: un conjunto de temas emblemáticos, una cima en la carrera de una leyenda, un hito para la historia de la música, una leyenda, una genialidad, una obra maestra, la muestra más clara de la grandeza del Jefe, del Boss, del mito viviente, Bruce Springsteen.
Y es que pase lo que pase, siempre tendremos la sensación de que todos, absolutamente todos, hemos nacido para correr. Para correr al lado de Springsteen.
























Taxman

2 comentarios:

G B dijo...

Glorioso, brillante, maravilloso.
Estupenda crítica de Born To Run.
No hay palabras para la perfecta descripción del disco.
Falta menos ya para que llegue Julio y disfrutemos de la que puede ser una de nuestras mayores aventuras.
Y como diría Russell: el boss es dios y tu un bacala de mierda.

Bravo. Cuenta atrás: 10 meses para el Springsteen Day.

Jesús Garrido dijo...

¿Pero no quedamos en que eran 8 meses? XD

Maravillosa crítica, impresionante. Qué disco tan grande y a la vez tan pequeño (8 canciones). Es increible como te cautiva desde la primera nota hasta la última. Y lo más increible es que vamos a verlo señores en directo. Pff, ni me lo creo aún.